Estados Unidos y otros 15 países criticaron a la Unión Europea el jueves 4 de julio, diciendo que su enfoque "basado en los peligros" para regular el uso de pesticidas y otras "herramientas críticas" utilizadas por los agricultores es perjudicial para los medios de vida en todo el mundo.
Su declaración, presentada a la Organización Mundial del Comercio, dijo que el enfoque de la UE creó una gran incertidumbre y se desvió de las evaluaciones científicas de riesgo, creando fallas que amenazan con aumentar significativamente en los próximos años.
Pidieron a la UE que revise su enfoque para la aprobación de productos, utilice métodos internacionalmente aceptados para establecer niveles aceptables para ingredientes potencialmente dañinos y ponga fin a la restricción comercial "innecesaria e inapropiada".
La declaración fue apoyada por Australia, Brasil, Canadá, Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, Guatemala, Honduras, Malasia, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Estados Unidos y Uruguay.
Los países signatarios dijeron que los agricultores deberían tener acceso a "la gama completa de herramientas y tecnologías seguras" para resolver el problema de producir más alimentos.
Una declaración enviada para su discusión al Consejo de Comercio de Mercancías de la OMC afirma que la UE ha prohibido ciertas sustancias que otros miembros de la OMC consideran seguras.
"Cuando se implementan estas medidas, parece que la UE está tratando unilateralmente de imponer su propio enfoque de regulación interna a sus socios comerciales", dijo el comunicado.